La concejal delegada de Salud, Rosa Pérez, ha conocido a la nueva junta directiva de la Asociación de Diabéticos Linense ‘Inmaculada’, con Fernando Pitach Jimenez, como presidente y Marisa Pitach Blanco, vicepresidenta. La edil les ha agradecido hacerse cargo de esta entidad destacando el desempeño de su labor asesora durante el actual estado de alarma.
Con motivo de la celebración del Día Mundial de la Diabetes, este sábado, 14 de noviembre, la concejal ha querido hacer mención al lema, “El Personal de Enfermería y la Diabetes”, elegido este año con el objetivo de crear conciencia en torno al papel crucial que el personal de enfermería juega en el apoyo a las personas que viven con diabetes.
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el personal de enfermería representan el 59% de los profesionales de la salud. La fuerza de trabajo mundial en enfermería es de 27,9 millones, de los cuales 19,3 millones son enfermeras profesionales. La falta mundial de enfermeras y enfermeros en 2018 fue de 5,9 millones. El 89% de esta falta se concentraba en países de renta baja y media. El número de educadoras en diabetes formadas y contratadas necesita crecer hasta un 8%al año para hacer frente a la alarmante escasez en la profesión para 2030.
Las enfermeras y enfermeros juegan un importante papel en el diagnóstico temprano de la diabetes para asegurar un tratamiento rápido, proporcionando formación para el autocontrol y apoyo psicológico a las personas con diabetes ayudándolas a prevenir complicaciones.
El Atlas de la Diabetes de la Federación Internacional de la Diabetes proporciona los últimos datos, información y proyecciones sobre el impacto mundial de la diabetes. Así, el número de personas que viven con diabetes se espera que aumente a 578 millones para 2030. Además, uno de cada dos adultos con diabetes está sin diagnosticar (232 millones) y la mayoría tienen diabetes tipo 2. Una de cada cinco personas con diabetes (136 millones) tienen más de 65 años. Dependiendo de la región mundial, hasta un 50 por ciento de las personas diagnosticadas con COVID-19 viven con diabetes.